El reloj autómata Fontaine aux Oiseaux fue galardonado con el premio al reloj mecánico en el Grand Prix d'Horlogerie de Genève 2022. Al combinar una animación bajo demanda y una visualización retrógrada de la hora, esta creación ofrece un doble espectáculo. El autómata cobra vida durante un minuto, revelando una escena conmovedora gracias al movimiento de los diferentes elementos. El agua del estanque comienza a ondularse, una flor de nenúfar abre sus pétalos mientras una libélula se eleva batiendo sus alas mientras gira suavemente. Las aves, situadas en el borde de la fuente, se despiertan haciendo resonar su canto. Para lograr esta excelencia se necesitó la maestría de artesanos experimentados y expertos en su campo.

La experiencia del automatista François Junod se combinó una vez más con la de los lapidarios, joyeros, engastadores, esmaltadores y ebanistas: muchos virtuosos que han dialogado, compartido su savoir-faire e ido más allá de sus límites para dar vida a una historia poética. Este singular objeto extraordinario, que ha requerido más de 4300 horas de trabajo en los talleres de Van Cleef & Arpels y más de 25 200 horas en total, encarna una aventura humana colectiva.

La creación Lady Arpels Heures Florales Cerisier también destacó al ganar el premio a la innovación. Su esfera tridimensional representa poéticamente el paso del tiempo mediante la apertura y el cierre de 12 corolas. La lectura de la hora se convierte en un espectáculo, pues las flores se abren y cierran de forma aleatoria, de forma que la escena de la esfera se renueva cada 60 minutos. En cada cambio de hora, las flores abiertas se cierran para dar paso a una nueva combinación.  Nada menos que 226 elementos magnificados por los artesanos del taller de relojería de Ginebra. Los pétalos de nácar pintado, las mariposas de pintura en miniatura, las ramas de oro esculpido y las nubes sobre nácar esculpido están realzadas por un engaste muy fino. 

El tiempo fluye al ritmo de la naturaleza en el jardín de Van Cleef & Arpels.